Tuve una experiencia inolvidable, nunca la había experimentado, nunca lo había entendido. De entrada ya tenía los nervios de punta, porque decidí ir sola, aunque no me encontrara a nadie, en metro, a un lugar desconocido y sin irme vestida de acuerdo a la ocasión. Sin embargo, no lo podía dejar pasar. Cuando llegué ya había empezado, el lugar sinceramente está descuidado, tiene su toque "gótico" por lo mismo pero se le podría trabajar un poco más para que no se vea tan abandonado. El acceso es de los peores que he visto en mi vida pero ya estando adentro la energía tiene un efecto amnésico. Lo primero que vi fue lo que siempre he considerado como fundamental en un concierto: una conexión increíble entre la gente y la banda, una total entrega, no había ni una persona que no cabeceara las canciones o las cantara. Luego el audio, de los mejores que he escuchado, se oía mucho mejor que en el disco, mucho mejor que en las versiones acústicas, no igual, sino mucho mucho mejor. La voz de la mujer increíble, vocerronón, que bárbara. La coordinación, la entrega, la iluminación, el espectáculo... todo lo que tiene un buen concierto, con la primera canción que oí, ya había llegado a esa conclusión... luego de rolas, decidí medio-grabar una, y luego seguí escuchando... ya era un buen concierto... pero poco a poco fui sintiendo algo que nunca había sentido... dejé de pensar, dejé de analizar, dejé de observar y me dejé llevar... de repente de la nada, sin darme cuenta, perdí totalmente la voluntad de mis sentimientos y sólo seguía lo que la música me dictaba... sin realmente concientizarlo estaba triste, deprimida y solitaria y cuando ellos decidieron que ya era demasiada melancolía se pusieron eufóricos... y yo con ellos, sin haber tomado nada, sin estar hasta adelante como a mi me encanta, sin sentir la espalda y los hombros de la gente, sin tener que brincar, sin tener que cantar, sin tener que gritar, yo estaba totalmente emocionada eufórica y sumamente entregada, cuando me di cuenta de todo lo que me estaba pasando, realmente entendí lo que ruster me decía acerca del sentir y entender.
Yo no era fan, no sé el nombre de las canciones, no sé las letras, es más, ni siquiera me he tomado la molestia de leer las letras, ni siquiera sé lo que dicen y sin embargo, con la pura música, con la pura energía, sentí y disfruté el concierto como nunca. Ahora no tuve que hacer un esfuerzo para personalizar las canciones, no tuve que poner atención en la letra, relacionarlo con algo mío, darle un toque sentimental, oirlo en el coche, aprendermela para luego gritarla en un concierto... no, ahora la propia banda lo personalizó en el momento, yo no tuve que hacer nada, absolutamente nada.
No estoy diciendo que me volveré metalera... pero ahora entiendo mucho más a los que oyen esta música, ahora entiendo porqué no escuchan otra cosa más, ya no se puede, todo lo demás lo entiendo, es "basura", cómo oir trova o electrónica si son tan simplistas.
Definitivamente no toda la música metal es buena y no toda la "otra" es mala, pero jamás había sentido todo esto en un concierto, de verdad que ahora respeto mucho más.
Siento que mis sensaciones sean para algunos comunes, chafas y simples, lo siento, es parte de mi "descaparazonamiento", cada día se aprende algo nuevo.