"No hay nada màs deprimente que llorar en un pecero"

Eso decìa mi amiga clots. La verdad a mi no me disgusta, es màs, creo que lo disfruto. No hay nada como clavarme en mi llanto sin tener que estar pensando en la manejada, ni tener que estar escondièndome de mis padres para que despuès convertirse en escenita cursi o que los del laboratorio me pregunten los motivos, y tampoco puedo echarme un cigarro que a la mera hora con los mocos y mi sinositis empieza un dolor de cabeza infernal.
En EL pecerito ni me fijo si la gente me ve, no me preocupo por el rìmel corrido ni por las caras extrañas. Con eso de que no se me da la mala copa y nunca he llorado en un bar o algo asì... creo prefiero los peceros.