de nuevo Puebla

Apenás regresé, de puebla y de europa y de todos lados, como que sigo sintiéndome con jetlag y con cansancio y medio me duele la garganta y medio me siento desubicada, pero bueh, al rato se pasa yo supongo.
Me fui de fin de semana con mi amiga a visitar a mi otra amiga, aquella que vive en su casa propia, con su marido y con su recién nacido... la última vez que la visité recuerdo que me fui muy orgullosa de no haber caído en ese círculo vicioso, de trabajos repetitivos, de series de televisión, de hacer los quéhaceres domésticos, de obedecer al marido o de pagar la renta... me sentía muy afortunada de tener mis libertades, mis estudios, mi beca, mis experimentos, mis aimgos, mi círculo... me sentía vergonzosamente dentro del camino correcto y no truncada y no desperdiciada... y ahora regresé con la sensación de todo lo contrario... de repente mi amiga es más sabia, más experta, más realizada, más feliz y yo mientras encerrada entre cuatro paredes del laboratorio, como mi única vida social la nocturna de la facultad que nunca antes había ni quería conocer, con mis quéhaceres diarios de asesinar ratas y contaminar neuronas, con mis pagos de mi celular por hacer mis llamadas absurdas de larga distancia y con una sensación de vivir desde afuera...
entonces ahora no sé si mis ideas de antes eran adolescentes e ingenuas y las de ahora hormonalmente adultas y correctas, o si ya perdí piso y mis juicios ya no son coherentes ni adminrables...
chales, otra vez Puebla me hizo temblar de miedo, cómo hubiera querido temblar como lo hice hace un año :s